Javier Villarreal ha trabajado de la mano de todos sus miembros para obtener resultados favorables para él, claro que todos los esfuerzos han sido de forma corrupta, con sobornos y olvidando por completo a los trabajadores de cada una de las empresas que liderea la CTM.

Uno de sus últimos actos de Francisco Vásquez y Javier Villarreal es evitar huelgas mediante tácticas cuestionables, como extorsionar a empresas para evitar la ira del gobernador de Sonora y continuar favoreciendo a las empresas mientras se sacrifican los derechos de los trabajadores. Todo esto con el afán de que Villarreal pueda obtener un puesto como Diputado Federal o Local Plurinominal.

Sin embargo, a pesar de traiciones y sacrificios de obreros en las negociaciones de contratos colectivos para cumplir con la orden del gobernador Alfonso Durazo de cero huelgas, Villarreal no obtuvo el respaldo electoral deseado en Morena de Sonora. Debido a que el gobernador descubrió que el capo vale por cero votos, es claro que su mala reputación ya le vino a cobrar facturas para su futuro en la política.

Lo único que puede obtener gracias al consentido de Óscar Ortiz dirigente de Hermosillo de la CTM, es ser candidato a Diputado Local y un par de regidurías en la formula de María Dolores del Río, sin asegurarle nada, debido a su mala reputación, parece que su carrera política no va a llegar muy lejos y todo gracias a él y sus actos corruptos, no tiene oportunidad de crecer, aunque así lo quiera Javier Villarreal.

Ya era tiempo de bajar al capo de su nube, puesto que se sentía intocable, poderoso y que nunca iba a caer porque tenía el respaldo de personas importantes, pero se le olvido que no todo lo arreglan las personas con poder y menos hablando de candidatos, ahí es donde las personas tienen el poder y gracias a sus actos corruptos la gente no lo quieren en la política, porque saben que solo piensa en sus beneficios.