Con la llegada del verano, Sonora se consolida como uno de los destinos turísticos más atractivos del noroeste del país. De acuerdo con la Asociación de Touroperadores, Anfitriones y Guías Turísticos, las reservaciones para la próxima temporada vacacional han incrementado un 15% en comparación con el mismo periodo del año anterior, con un marcado interés por las playas y municipios de la Sierra Alta.
Julio Rascón, presidente del organismo, informó que el auge en la demanda turística se ha reflejado en una mayor anticipación de reservaciones para los meses de junio, julio y agosto, lo que representa una señal positiva para la industria local tras varios años con fluctuaciones a causa de la pandemia y las condiciones climáticas.
“Ya tenemos fechas anunciadas para viajar en vacaciones de verano para que se animen a conocer Sonora. Puerto Peñasco, la Sierra Alta, las playas de Guaymas, Huatabampito, Yécora y Álamos son de los sitios más buscados, tanto por turistas locales como nacionales”, señaló Rascón.
Preferencias por sol, mar y naturaleza
Los destinos más solicitados para esta temporada incluyen los clásicos del litoral sonorense, como Puerto Peñasco, Guaymas y San Carlos, reconocidos por sus playas de aguas tranquilas, atardeceres espectaculares y una creciente infraestructura turística. Asimismo, se ha registrado una creciente demanda por municipios enclavados en la sierra, como Yécora, donde el turismo de naturaleza, aventura y cultura ofrece una alternativa refrescante frente al calor costero.
Álamos, Pueblo Mágico de rica historia y arquitectura colonial, también figura entre los lugares más visitados, junto con Huatabampito, playa del sur del estado con creciente popularidad por su tranquilidad y ambiente familiar.
Atractivo para turismo internacional
El interés turístico por Sonora no se limita al mercado nacional. Según la Asociación, también se ha observado un repunte en el número de visitantes extranjeros, principalmente provenientes de Estados Unidos y Canadá, quienes buscan experiencias auténticas y eventos culturales con fuerte arraigo indígena.
Uno de estos eventos es el festejo del Año Nuevo Comcáac (Seri), que se celebra entre junio y julio en comunidades del desierto de Sonora. Esta festividad ha logrado atraer a turistas internacionales interesados en conocer las tradiciones de los pueblos originarios y disfrutar de las costas del Mar de Cortés.
“Hemos tenido varias fechas apartadas para empezar el Año Nuevo Seri en junio. También hay mucho interés para las playas durante julio y agosto, y aunque ya saben del calor de aquí, la gente sigue viniendo”, comentó Rascón.
Buen panorama para el sector turístico
El incremento en la demanda turística para el verano representa una oportunidad de reactivación para operadores locales, guías, hoteleros y prestadores de servicios turísticos, quienes esperan capitalizar el interés creciente por conocer los paisajes, la cultura y la hospitalidad sonorense.
Con el 15% de aumento en las reservaciones y el fortalecimiento de rutas turísticas locales, Sonora se perfila para tener una de sus temporadas más activas de los últimos años, consolidándose como un destino que combina mar, montaña y cultura en una misma región.
